El orgasmo, ¡cuánto se ha dicho sobre él! Algunos orgasmos son débiles, otros más intensos, en ocasiones se siente de forma localizada en los genitales, pero otras te hacen estremecer  el el cuerpo. En ocasiones  se siente como si algo picara, pero en otras la energía fluye hasta sentir el éxtasis, literalmente haces catarsis a través del orgasmo.

Orgasmo femenino y masculino

En las mujeres existen más variedades de orgasmo. Se habla del orgasmo clitoridial, cuando el estímulo es directo en el clítoris, el vaginal, cuando se estimula el llamado  G (que no es otra cosa que una extensión del clítoris), el anal (en la polémica puerta trasera), incluso el orgasmo uterino, el cual se presenta cuando las contracciones vaginales son tan fuertes que viajan hasta el útero y cérvix transformándose en suaves vibraciones. Ah, y no olvidemos los multiorgamos, donde el tiempo refractario de la mujer se hace casi nulo y permite el goce una y otra vez.

En el caso de los hombres existe el orgasmo con eyaculación y el orgasmo sin eyaculación, el orgasmo anal (estimulando el punto P) y también puede haber multiorgasmos, especialmente en los varones que logran controlar su eyaculación y se hacen expertos en el orgasmo seco. Sin olvidar que tanto hombres como mujeres pueden experimentar también orgasmos mentales, de los que ya hablamos con anterioridad.

Ahora bien, para que tus orgasmos sean más placenteros no necesitas artefactos especiales, ni clases de tantra (lo cual no le hace nada mal a nadie), con los siguientes consejos mejorarás tu experiencia de manera considerable.

Abandona el camino seguro

Tú y tu pareja se conocen y ya saben la forma para llegar al orgasmo, pero utilizar la misma ruta a la larga se vuelve aburrido. Una vez que has desarrollado un método seguro para llegar al clímax, solo o con la pareja, es difícil abandonarlo y buscar alternativas, pero ¡tienes que hacerlo! Deja la vía directa y vete por el trayecto largo, aunque al principio parezca un callejón sin salida. Experimenta, no importa si no lo consigues al principio, solo prueba. Tampoco te obsesiones con la idea de buscar más formas de conseguir el orgasmo, hay personas que tienen patrones muy específicos de excitación y orgasmo, ¡y tampoco está mal! Lo importante es no estar tenso.

Dale más tiempo a los previos

Las mujeres agradecen esta parte porque para ellas es más fácil alcanzar e clímax cuando han tenido una adecuada estimulación previa. Olvídate de ir directo a la penetración, ¡error! Por mucho que ardas en deseo retrasa la gratificación. Detente, acaricia su cuerpo, goza sus formas, bésala con cariño. Puedes alternar el coito con el sexo oral, verás que la tensión sexual se incrementará, y el orgasmo será más intenso. Es más, tampoco busques la eyaculación directa en el caso de la masturbación. Incluso ahí debes tomarte tu tiempo, detente, respira, vuelve a comenzar.

Sigue estimulando después del orgasmo

Los orientales lo utilizan mucho y sí sirve. Antes, durante y después del orgasmo, puedes esparcir la energía en todo tu cuerpo, en lugar de focalizarlo en el pene o el clítoris. Tanto hombres como mujeres pueden lograr esto con un poco de concentración y utilizando caricias largas y suaves en el vientre y espalda. Se necesita práctica, paciencia y creer en la energía realmente, pero quienes lo han logrado relatan experiencias increíbles.

Fuente: http://www2.esmas.com/salud/sexualidad/685328/como-mejorar-orgasmo/