Esta sin dudas será la elección más controversial  para elegir los miembros para el Salón de la Fama, el motivo??? “LOS ESTEROIDES”. Entonces tenemos las dos caras de la moneda: Los que piensan que los jugadores que han usado sustancias prohibidas no merecen optar por este galardón, y del otro lado, los que piensan que, a pesar del consumo de los esteroides, hay números, hazañas y nombres que no podemos obviar.

Quienes entonces merecen ingresar a Cooperstown? Que es una pequeña ciudad perteneciente al estado de Nueva York en los Estados Unidos, donde se encuentra el Templo de los Inmortales o Salón de la Fama y el Museo Nacional del Béisbol, inaugurados simultáneamente el 12 de junio de 1939. Aquí se atesoran documentos escritos y audio visuales, objetos pertenecientes a jugadores, dirigentes o propulsores del béisbol, que sirven como fuente fundamental en el estudio de la historia de este deporte en el país.

Los jugadores elegibles provienen de un listado aprobado por un comité que descarta los candidatos menos calificados, dentro de los requisitos básicos que deben cumplir, se encuentran, tener cinco años o más de retiro del deporte activo y haber jugado diez años como mínimo en las Grandes Ligas del béisbol de Estados Unidos. La elección se lleva a cabo por la Asociación de Escritores de Béisbol de América  o por el Comité de Veteranos, que consta de miembros del Salón y los ganadores de los premios Frick y Spink.

La boleta consta de 25 a 40 candidatos y cada escritor puede elegir hasta diez jugadores. El jugador beneficiado por el 75 % o más de los votos es exaltado, y su inducción se realiza en una ceremonia que forma parte del fin de semana de exaltación, conocido como el “HOF Weekend”. Hasta el 2001 el jugador que recibía menos del 5% de los votos era borrado del listado y no podían participar en elecciones venideras, a partir de este año, cambios en las reglas permiten al Comité de Veteranos hacer excepciones, también pueden hacer lo mismo con aquellos jugadores que fracasan en el intento de ser elegidos en los 20 años posteriores a su retiro del deporte activo.
Desde que fue creado en 1936 apenas 208 " jugadores grandes ligas" (el 1% de los jugadores de todos los tiempos) han sido electos a Cooperstown. El porcentaje indica claramente lo difícil que es ingresar al "HOF" (Hall Of Fame).

Este año figuran nombres como el de los dominicanos  Sammy Sosa,  Julio Franco y José Mesa y los puertorriqueños Sandy Alomar Jr. y Roberto Hernandez, entre otros.

Ahora bien soy de los que opino que nombres como Sammy Sosa, el 5to mayor jonronero de la historia con 609, que fue protagonista de la historia más estremecedora de las grandes ligas de los últimos años  en 1998 y 1999 junto a  Mark McGwire en la guerra por el liderato de cuadrangulares, destacando que hasta en china gozaban esos cuadrangulares con sabor dominicano.

Sin embargo, los rumores de que ambos  usaron sustancias prohibidas, han circulado desde entonces. En una encuesta realizada por Associated Press (AP) entre 112 de los votantes de este año a Cooperstown, Sosa apenas obtuvo un 18%, fuerte indicio de que el dominicano estará lejos del 75% necesario para ingresar al hogar de los inmortales.

Los latinos, especialmente los dominicanos, nos mantenemos a la espera de que mas allá del rumor de del uso de los esteroides del famoso 30-30 Sammy Sosa, en un futuro no muy lejano podamos verlo ingresar al ansiado Salón de la fama.