Para todos aquellos que no sepan qué son las estrías cabe decir que son el resultado del rompimiento de las fibras elásticas de la piel. Cuando la dermis se estira, las fibras con menos elasticidad se rompen y aparecen esas marcas conocidas como estrías.

Si hay algo antiestético eso son, sin duda, las estrías. Y es que es indudable que el aspecto de nuestra piel es algo que a todos nos preocupa.

Afortunadamente, estas marcas se pueden combatir para minimizar su apariencia.

Para todos aquellos que no sepan qué son las estrías cabe decir que son el resultado del rompimiento de las fibras elásticas de la piel. Cuando la dermis se estira, las fibras con menos elasticidad se rompen y aparecen esas marcas conocidas como estrías.

Son frecuentes sobre todo en mujeres en la etapa del embarazo. Al principio las estrías son de color rosáceo, luego rojizo y finalmente blancas.

Básicamente son el reflejo de la separación de la piel.

Las estrías aparecen sin previo aviso ni dolor, aunque en ocasiones pueden manifestar una ligera sensación de ardor y estiramiento.

Para prevenirlas es recomendable mantener la piel hidratada. De esta forma lograremos tener la dermis más flexible y, ante los posibles cambios físicos, podrá estirarse sin causar la rotura de las fibras de la piel.

Tipos de estrías
Debemos tener en cuenta que no todas las estrías son iguales.

En primer lugar, encontramos las estrías de distensión, que son las que se producen cuando la piel se distiende o estira por cambios bruscos de peso.
En segundo lugar incluiríamos aquellas que se forman en la etapa de la pubertad. Estamos ante un período muy delicado en el que el cuerpo sufre importantes cambios.
También en la pubertad los trastornos hormonales pueden dar lugar a la formación de estrías atróficas que, de no evitarse, serán irreversibles.

En el tercer puesto estarían las llamadas estrías de gravidez: son las que resultan del embarazo, sobre todo en los pechos, caderas, nalgas y en la panza.
Por lo general, se producen en el sexto mes de embarazo cuando la piel comienza a tensarse.

Las llamadas estrías de origen vatrógeno pueden surgir después de un tratamiento con corticoides.
Por último, las estrías también pueden aparecer como fruto de un exceso de ejercicios violentos que producen una modificación del diámetro textural (en el caso de deportistas, bailarinas, etc.).

¿Cómo mejorar el aspecto de las estrías?

1. Ayúdate de cremas

Las cremas y productos ricos en vitamina A, como por ejemplo, la rosa mosqueta, son ideales para combatir las estrías.

Suelen contar con propiedades regenerativas y aplicarlas a diario, ya sea en crema o aceite, hará que tus estrías mejoren notablemente.

2. Toma vitamina A y B
Las vitaminas A y B harán que tu cuerpo regenere tejido conjuntivo y produzca colágeno, por lo que serán muy adecuadas para mejorar tus estrías.

Para obtenerlas procura aumentar el consumo de:

Kiwi
Zanahorias
Arándanos
Peras
Higos
Sandía

3. Exfoliantes

Los tratamientos exfoliantes ayudan a remover las impurezas y las diferentes capas de la piel, por lo que son ideales para tratar esta molesta condición.

El ácido mandélico (presente en las almendras amargas) y el glicólico (extraído de la caña de azúcar) nos proporcionarán resultados muy satisfactorios.

Si quieres recurrir a tratamientos más profundos, la dermoabrasión con punta de diamante es de los más efectivos.

4. Los tratamientos con láser

Los tratamientos con láser pueden ser otra de las alternativas que te ayudarán a combatir estas molestas marcas. No obstante, debido a su coste, no todo el mundo tiene la posibilidad de hacerlo.

A pesar de no ser un tratamiento natural, se obtienen muy buenos resultados, por lo que tampoco debemos menospreciarlo.

5. Mesoterapia
La mesoterapia es un tratamiento ideal para acabar con las estrías que acaban de aparecer (las de color violáceo).

Consiste en inyectar sobre la zona en cuestión determinados compuestos (como ácidos hialurónico, antioxidantes, vitaminas, minerales o aminoácidos) para favorecer la regeneración celular y recomponer la piel.

Debemos consultar con nuestro médico sobre la idoneidad de esta práctica en nuestro caso particular y recurrir siempre a profesionales.

6. Cola de caballo

La cola de caballo no solo es buena para la retención de líquidos, sino que también puede ser efectiva para las estrías, gracias a su aporte de silicio.

Ingredientes
4 tazas de alcohol de 40º (1 litro)
½ taza de cola de caballo (100 g)
8 o 10 gotas de jugo de limón
2 tazas de agua (500 ml)
Preparación
En un frasco oscuro combinaremos el alcohol de 40º con la cola de caballo y las gotas de jugo de limón.
Dejaremos macerar durante un mes. Pasado este tiempo, lo diluiremos con las dos tazas de agua.
Masajeramos con este preparado las zonas afectadas por las estrías, dos veces al día.
Verás como notas la diferencia.

Fuente: Mejor con salud