¿Alguna vez te has enamorado de un maestro? Algunos no sólo se enamoran si no se atreven a dar el siguiente paso

Todos, hombres y mujeres, alguna vez en nuestra vida tuvimos un crush con un maestro o maestra, pero de eso a dar el primer paso para que pase algo, hay una enorme diferencia. No obstante, en algunos casos laatracción que se siente es tal que pareciera inevitable el acercamiento. Así comienzan las historias, con una pequeña e "inocente" atracción, pero en el caso de Alfonso las cosas fueron más allá:

Ya sabes, la calentura de universidad. Había una maestra que me daba ética, la canija sabía que tenía lo suyo porque siempre iba muy guapa y bien arregladita. Ella a lo mucho tendría 32 años cuando esto pasó, así que en realidad estaba súper joven. Era la típica maestra guapa que cuando te acercabas a ella, ¡ufff, el olor alperfume era delicioso! Frutal, aún me acuerdo.

El chiste es que me dió clase durante cuatro semestres, y fue en el tercero cuando yo empecé a coquetearle. Entiéndase que este momento fue en el que pensé "Me encanta, tengo que salir con ella". Comencé a llevarle detalles hasta que un día accedió a ir a comer conmigo. No lo podía creer, yo estaba loco por ella.

Al paso de los días en la escuela, como que nos llevábamos mejor. Obvio enfrente de los demás el trato era sólo cordial pero se sentía una tensión sexual que no podría describir. Un día hubo una fiesta de cumpleañosde un amigo y la invitamos. Un par de tragos, el calor de la fiesta y la plática de amor y pareja. Estábamos en la cocina y no pude más: me le lancé. La besé con todos los nervios que la inexperiencia puede darte y me sentí el más fregón de la universidad porque ella me respondió el beso. Después pasaron más cosas y fue justo ahí en la cocina. Fue inexplicable la adrenalina que sentí de que alguien nos cachara, de saber que estaba besando y tocando a una mujer 10 años mayor que yo y que además ¡era mi maestra!

Al salir de la cocina obviamente todos sabían que ahí había pasado algo, pero no se atrevieron a preguntar porque finalmente ella no dejaba de ser la maestra, pero ella no pudo soportar la presión y supe que las cosas cambiarían.

Así fue, los rumores fueron esparciéndose más de lo que en realidad había sucedido, pero a pesar de eso volvimos a salir. Entre los chismes de la escuela y que ella se dio cuenta de que estaba saliendo con un chavito, de pronto puso distancia. Fue muy marcado, me trataba como si apenas me conociera. Nunca supe si esto fue porque le llamaron la atención o porque ella lo había decidido porque bueno, a final de cuentas ambos éramos mayores de edad y sabíamos lo que hacíamos. Terminó el semestre y sin decirme nada alsemestre siguiente ella ya no estaba. Cambió su celular y nunca volví a saber de ella. Creo que lo único que me quedó, además del corazón roto, fue el recuerdo de aquella noche y ese olor a perfume frutal que todavía me pone mal cuando lo huelo en alguien más".