Para ahorrarse trabajo, es importante organizar el menú con anticipación.

Nueva York — La cena de Thanksgiving es en apenas una semana y ya muchos empiezan a sufrir ataques de nervios. Pero, la verdad, no hace falta dejarse llevar por el estrés; es cuestión de planificar para luego poder disfrutar. 

"Hay que dejar el temor a un lado. Sabemos que es una ocasión especial, pero todos podemos hacerlo, aunque no se tenga mucha experiencia en la cocina", asegura la chef Ema Quevedo, quien comparte sus consejos a través de la página vivemejor.com. 

Lo primordial, dice, es empezar a organizar el menú desde ya, porque es lo que más tiempo toma. Si cada año prepara lo mismo, entonces establezca el número de invitados, para ver cuánta comida hay que comprar. Si este año quiere ser un poco más creativo, asegúrese de buscar las recetas que piensa probar, pero no cometa el error de embarcarse en proyectos muy complicados. 

"La idea es buscar recetas sencillas, fáciles y rápidas, no una que nos haga pasar cinco horas en la cocina", apunta Quevedo. 

Ya con los platillos a degustar establecidos, organice qué se puede preparar de antemano, con dos o un día antes, para no estar metida en la cocina el durante la celebración y así poder compartir con la familia.

Claves a considerar antes de la preparación

Pero sin duda el mayor dolor de cabeza para muchos, y aún más para los latinos por la poca práctica que tienen a la hora de cocinarlo, es el asunto de la preparación del pavo. A veces resulta muy grande o muy pequeño, muy seco o muy crudo, muy salado o muy insípido. Son muchos los errores que se pueden cometer al cocinar el ave. 

Primero hay que saber cuántas personas van a comer de ese pavo. Se aconseja que para 8 personas el pavo pese 12 libras, para 10 unas 15 libras, para 12 unas 18 libras y para 14 unas 20. Si queremos que sobre para el día siguiente, la idea es calcular una libra y media por persona. 

Lo normal es comprar el pavo congelado; hágalo unos días antes. Para descongelarlo se necesitan unas 24 horas por cada cinco libras, así que asegúrese de sacarlo del congelador con suficiente tiempo. 

"Marínelo por lo menos desde el día anterior, para que absorba todos los sabores. Y sea cual sea la receta que haya escogido, el pavo debe cocinarse hasta que obtenga una temperatura interna de 165 grados", acota la chef. 

El tiempo de cocción varía dependiendo del tamaño. A 350° los tiempos son los siguientes: 

- 12 libras: 3 a 4 horas 

- 15 libras: 4 a 4 ½ horas 

- 18 libras: 4 ½ a 5 horas 

- 20 libras: 5 a 6 horas 

Como casi todas las carnes, el pavo no debe ir del horno a la mesa. Hay que cubrirlo con papel aluminio y dejarlo reposar unos 30 minutos para que los jugos se redistribuyan. 

Ya con el pavo listo, las ensaladas y vegetales cocinados, uno o dos postres para finalizar, siéntese entonces a dar las gracias por todo lo recibido este año, que finalmente de eso se trata.

Receta de la chef Ema Quevedo

Rinde: 8 porciones    

Tiempo de preparación: 15 minutos    

Tiempo de cocción: 3 horas 0 minutos  

Tiempo de reposo: 20 minutos 

Ingredientes: 

• Un pavo de 10-12 lbs. fresco o descongelado 

• 1 taza de mayonesa  

• 1 cebolla o echalote grande picada 

• 1 cucharada romero tomillo y salvia picadas* 

• 1 paquete de Knorr® Gravy sabor Pavo Asado preparado según las instrucciones del paquete 

Preparación: 

Precaliente el horno a 425°. Saque las menudencias de las cavidades del pavo y enjuague por dentro y por fuera. Séquelo con toallas de papel. Sazone el pavo con sal y pimienta negra molida al gusto. 

Mezcle la mayonesa con la cebolla o echalote y las hierbas en un tazón mediano; reserve. Comenzando por la apertura del cuello, separe con cuidado la piel del pavo y unte la carne con la mitad de la mezcla de mayonesa por debajo de la piel. Amarre las piernas con hilo de cocina. 

Coloque el pavo, con la pechuga hacia arriba, sobre un asador poco profundo con rejilla; úntelo por fuera con el resto de la mezcla de mayonesa. Cúbralo con papel de aluminio grueso. Baje la temperatura a 325° y ase el pavo por hora y media. Retire el papel aluminio y ase el pavo por  una hora más, aproximadamente, rociando de vez en cuando con su jugo, hasta que un termómetro insertado en la parte más gruesa del muslo marque 165°. Déjelo reposar, cubierto ligeramente, por 20 minutos antes de cortarlo. Sírvalo con el Knorr® Gravy. 

*Sustitución: Use una cucharadita de romero, tomillo, o salvia seca, triturada.