No es una broma, de hecho, la revista científica The Lancet, fue la primera en hacerse eco. Ya hemos hablado de la nomofobia (adicción al móvil), pero este diagnóstico va más allá. No se trata solo de que tu forma de comunicación por excelencia sea este servicio de mensajería instantánea, (que también, nos olvidamos de lo maravilloso que es el face to face) y eso te pase factura en tus relaciones o te provoque ansiedad, si no que también este hábito está afectando a tu cuerpo. La whatsappitis existe y es un problema físico, no psíquico. Se trata de la tendinitis aguda del dedo pulgar, principal perjudicado cuando las conversaciones de whatsapp se tornan interminables.
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La primera diagnosticada fue una mujer de 34 años que dedicó seis horas de su día (seguidas y sin parar) al incombustible Whatsapp. El médico lo tuvo claro y así lo firmó en su informe: padece de “whatsappitis”, tendinitis en el dedo pulgar por un exceso de uso. ¿Lo peor? Que no es un caso aislado. Cada vez es más frecuente recibir en las consultas a pacientes con tendinitis en los dedos de las manos, en la muñeca o en el codo.
¿Qué es la tendinitis?
Es una de las dolencias más comunes y, aunque no es grave, si es molesta y dolorosa. La tendinitis es la inflamación de algún tendón provocada por el esfuerzo constante de una parte del cuerpo (véase uso incontrolado de tu smartphone). Su tratamiento es sencillo, el objetivo es bajar la inflamación y aliviar el dolor por lo que es probable que te recomienden reposo e, incluso, te lo inmovilicen con una férula.
¿Solución? No abusar del uso de tu smartphone. ¿Imposible? Al menos, escribe de forma pausada y mantén unos ratitos de descanso entre conversación y conversación. ¿Deseo irrefrenable de charlar? Puebra a alternar con llamadas de voz.
¡Tus dedos de lo agradecerán!
Fuente: http://www.cosmohispano.com/belleza-salud/cuerpo-mente/articulo/whatsappitis-tendinitis-aguda-en-el-dedo-pulgar-461405506664
