Los baños almacenan en su superficie y en algunos de su accesorios, bacterias y virus que provocan enfermedades y si se trata de baños de uso público, la probabilidad de enfermarnos aumenta, en estos existen bacterias que se transmiten a través de las heces fecales, como la E. Coli, estreptococos, estafilococos, pseudomonas, entre otras.

Estas bacterias pueden penetran a nuestro cuerpo por la piel, la mucosa de la nariz, la boca y por la uretra.

Las enfermedades que podemos adquirir al utilizar un baño público -que no esté limpio- si no usamos las medidas higiénicas son infecciones gastrointestinales, respiratorias y de la piel. En cambio aunque la mayoría de las personas lo creen así las infecciones de transmisión sexual es poco probable que pueda ser adquirida en este espacio.

Atenta contra la salud, la disponibilidad de baños públicos sin una higiene adecuada sobre todo en planteles escolares, establecimientos de salud, centros geriátricos etc. Mientras esta situación cambia tomemos conciencia de ese riesgo.