Agentes de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) de Estados Unidos hicieron ayer un entrenamiento de operación antidisturbios en uno de los puentes internacionales de El Paso (Texas), al tiempo que miles de centroamericanos en caravanas atraviesan México rumbo a la frontera.

Cerca de un centenar de agentes, con armas largas y equipo antimotín, algunos de ellos encapuchados, se colocaron a unos metros de la línea que divide Estados Unidos con México y realizaron una serie de formaciones tácticas durante unos cuarenta minutos, mientras un helicóptero de CBP sobrevolaba la frontera.

El entrenamiento tomó por sorpresa a cientos de usuarios del puente internacional Paso del Norte, quienes, al ver obstaculizado el puerto de entrada a Estados Unidos, tuvieron que esperar de pie o a bordo de sus vehículos, del lado mexicano de la frontera.

Rubén Jáuregui, portavoz del departamento de Aduanas y Protección Fronteriza del sector de El Paso, dijo a Efe que se trató de un “operativo” con el fin de que los agentes que protegen la frontera con México estén preparados para la eventualidad de un incidente.

“Tenemos que asegurarnos de que estamos preparados para cualquier incidente”, aseguró.

El funcionario declinó comentar acerca de la relación entre el operativo y las caravanas de miles de centroamericanos que avanzan por México con la intención de pedir asilo a su llegada a EE.UU.

Una primera caravana, compuesta por unos 3.500 migrantes, partió el 13 de octubre de San Pedro Sula (Honduras) y, tras pasar por Guatemala, actualmente marcha por México rumbo a Estados Unidos.

Un segundo convoy, formado por 1.500 migrantes, cruzó ayer a pie el río Suchiate, que separa Guatemala de México, mientras que para los próximos días se prevé la llegada a México de otra caravana de salvadoreños que este domingo abandonaron su país con intención de llegar a territorio estadounidense.

El presidente estadounidense, Donald Trump, publicó en su cuenta de Twitter que su gobierno impedirá la entrada al país de los inmigrantes de la caravana y que será mejor “que se den la media vuelta y se regresen a su país”.

Algunos sectores han dicho que el presidente busca aprovechar los temores sobre el tema de inmigración y de la caravana de centroamericanos para beneficio político en las próximas elecciones legislativas de mitad de mandato. El Gobierno también anunció ayer que desplegará unos 5.200 soldados en la frontera con México para responder a las caravanas de migrantes centroamericanos para “endurecer la frontera”.

Según las organizaciones proinmigrantes, las caravanas de migrantes son una iniciativa legítima de miles de personas que buscan mejores oportunidades para sus familias.

Pentágono enviará tropas
Donald Trump aumentó ayer sus amenazas contra la caravana migrante que avanza lentamente hacia la frontera con Estados Unidos, mientras el Pentágono se prepara para desplegar a miles de efectivos estadounidenses para apoyar a la Patrulla Fronteriza.

“¡Es una invasión a nuestro país y nuestro ejército los espera!”, tuiteó Trump, quien busca enfocar la discusión de cara a las elecciones legislativas en el tema de la inmigración.

Hizo esta advertencia mientras el Pentágono soluciona los detalles para enviar a miles de efectivos a la frontera en respuesta a la caravana de migrantes centroamericanos, que todavía están a cientos de kilómetros (millas) de la frontera estadounidense, informaron tres funcionarios. Los funcionarios hablaron bajo condición de anonimato para poder discutir un plan que todavía no se ha completado y que todavía no ha sido aprobado por el secretario de Defensa, Jim Mattis. La Casa Blanca también estudia medidas adicionales en la frontera, incluido prohibir a quienes viajan en la caravana solicitar asilo legalmente y evitarles entrar a Estados Unidos.

El presidente ha intentado convertir a la caravana en un tema clave electoral días antes de las elecciones que determinarán si los republicanos mantendrán el control del Congreso.

Fuente: https://listindiario.com