Francisca Fúnez reparte su tiempo en varias microempresas.

San Pedro Sula, Honduras

Si hay un concepto que Francisca Fúnez conoce muy bien es el de diversificar; eso la llevó de tener una venta de carne a convertirse en una emprendedora que maneja cinco negocios diferentes.

Esta exoperaria de maquila entendió su tiempo, esfuerzos y recursos podía repartirlos en más de un negocio y en los últimos seis años ha logrado abrir cinco pequeños pero prósperos negocios en la colonia Lomas del Carmen, donde reside.

Francisca formó parte de la lista de hondureños que se quedaron sin trabajo cuando la empresa en las que laboraba cerró sus puertas para irse a otro país.

Sin quedarse de brazos cruzados, decidió utilizar el dinero de sus prestaciones laborales para iniciar con su primer negocio, una venta de carne. “Empezamos solo con dos congeladores y al año siguiente abrimos la venta de verduras para ofrecer las cosas que la gente puede necesitar en su cocina”, relata. Parte de su éxito se basa en saber observar su entorno y darse cuenta de las necesidades que existen en la comunidad. “Pienso que es cuestión de analizar qué funciona en el lugar donde uno se encuentra ubicado, porque muchas veces se lucha con negocios que no están en el lugar adecuado”, dice la pequeña empresaria.

De esa forma, tomó la decisión de invertir y abrir, además de los negocios que ya tenía, un cibercafé, una barbería y una venta de comida, diversificando sus negocios y convirtiéndose en una emprendedora de éxito.