No importa que tengas jornadas extenuantes de trabajo, hijos, rutinas de ejercicios y mil y un quehaceres que saturan tu agenda diaria, siempre es necesario sacar un tiempo para tener encuentros íntimos con tu pareja.

Y es que, según apuntan los expertos en el tema, disfrutar plenamente de la sexualidad con frecuencia es clave para mantener viva la chispa de la relación. Así que, en la cama, no hay cabida alguna para la prisa y el estrés, que suelen ser enemigos del placer.

El psicólogo clínico Luis Caraballo explica, en este sentido, que para gozar la intimidad al máximo, es preciso nutrirla con los ingredientes adecuados. Entre ellos destaca la seducción, la buena comunicación, la confianza y el respeto, elementos que –sin duda– intensificarán la pasión.

“Hoy en día vivimos una vida bien rápida, ajetreada, con altos índices de estrés y en la que hay un montón de factores que pudieran llevar a que las parejas no estén en ese nivel de intimidad que quisieran. Pero ambos miembros tienen que tener el compromiso de buscar ese tiempito tanto para el afecto –que son los cariños y las atenciones–, como también para la intimidad sexual, que es más física”, destaca el doctor. Caraballo.

“En una pareja tiene que haber mucha confianza, mucha comunicación y mucho compromiso. Ésos son componentes bien importantes a la hora no tan sólo de tener una vida sexual satisfactoria, sino de tener una relación completa”, abunda el especialista, quien imparte cursos de sexualidad en el Recinto de Ciencias Médicas.

En estas páginas, el experto ofrece varios consejos para que tu relación mejore en la cama y puedas disfrutar al máximo tu vida sexual.

Exprésate sin tapujos 

Comunícale abiertamente a tu pareja tus gustos, deseos y fantasías sin temor alguno.  Así estarán bien compenetrados en el terreno sexual.  “En muchas ocasiones las personas quieren hacer cosas diferentes, y es importante que puedan tener ese diálogo, siempre tomando como base el respeto”, señala el psicólogo Caraballo.

Acéptate como eres 

Aunque la sexualidad suele asociarse con un físico joven y atractivo, la realidad es que puedes disfrutar de la intimidad en todas las etapas de tu vida (incluida la vejez).  “No importa que ya no tengas el cuerpo de hace 15 o 20 años atrás, no debes sentir vergüenza de tu cuerpo o incomodidad en el acto sexual”, recalca el experto.

Cero presiones 

Pensamientos como “si no llevo a mi pareja al orgasmo, soy una porquería” o “si no duramos más de una hora, implica que nada funcionó” sólo consiguen que te atormentes demasiado y les restan espontaneidad a los encuentros sexuales.  “Son ideas que harán que no disfruten, por sentir que tienen que llenar unas expectativas”, dice el galeno.

Descubre el cuerpo 

Cuanto más explores el físico de tu pareja y sus zonas erógenas, más placer podrás ofrecerle y más podrán disfrutar los dos.  La clave de la excitación es, de hecho, conocer cómo reaccionan las distintas partes a, por ejemplo, una caricia o un beso.  “La norma no debe ser quitarte la ropa, tirarte a la cama e ir directamente al coito”, indica.

Diviértete

El humor ayuda muchas veces a bajar la tensión y a disipar la incomodidad que puede surgir en la cama.  Recuerda que el sexo debe ser divertido y placentero, no una cuestión estresante.  “Si el hombre tiene una eyaculación precoz o a alguien le da un calambre tratando de hacer una postura, usen el humor para disfrutarlo todo”, apunta.

Enemigos del placer

-Falta de imaginación

-Pobre higiene 

-Muchas exigencias

-Pensar sólo en uno

-Conflictos sin resolver

-Exceso de inhibiciones

-Siempre omitir el foreplay

Fuente:  Dr. Luis Caraballo, psicólogo